viernes, 28 de agosto de 2009

Jugar a ser dioses


Creemos que la tecnología y el progreso lo son todo. Creemos que podemos cambiar los cursos de los ríos, construir en arenas movedizas, encauzar lluvias, curar enfermedades, volar, vivir en el espacio o bajo el mar, crear animales y plantas híbridos, alterar cromosomas, hacer fértiles a los estériles...

Creemos que lo tenemos todo bajo control.

Y por eso, cuando algo se nos escapa un poquito y no tenemos una mano con repóker de ases, nos acojonamos y todo el mundo se vuelve paranoico.

Para ejemplo, un botón. Miren ustedes la histeria colectiva con la "gripe A" (no quieren llamarla porcina, spongo que porque, supongo, considerarán una deshonra que el hombre haya contraido una enfermedad con tan poco glamouroso origen). La gente duda si llevar los niños al colegio antes de que los vacunen, acuden a urgencias con cualquier estornudo, estudian cómo "colarse" unos puestos en la cola de los vacunables, se permite a la industria farmacéutica saltarse protocolos de experimentación y hacer ensayos en seres humanos sin apenas haber probado la vacuna en animales...

¡Qué jodida es la vida! Nos creíamos dioses, y un pequeño virus (una mierda de bichito, vamos), nos amenaza con el jaque mate.

Yo no sé ustedes, pero mi menda pasa de asustarse. Las epidemias, las riadas, las erpciones volcánicas han sido formas en que la Madre Tierra ha ido haciendo a lo largo de sus muchos siglos sus particulares "ERE" (expedientes de regulación de explotadores), y esto no va a dejar de pasar.

Y no sé si será la gripe porcina la que traiga el Apocalipsis (que creo que no, como tampoco la encefalopatía espongiforme -la enfermedad de las vacas locas, ´¿se acuerdan?- ni la gripe aviar lo fueron, aunque así lo anunciaban), o cualquier otra enfermedad, catástrofe o acto de la Naturaleza.

Lo que si sé es que si me tiene que tocar, me tocará. Así que, a seguir viiendo con la mayor normalidad posible, sin ataques de histeria colectiva y, a ser posible, en equilibrio.

Consume sólo lo que necesites, intenta destruir lo menos posible, dispon de la Naturaleza, pero no abuses de ella. Y sé modesto y humilde, y deja de pensar que el Hombre tiene solución para todo.

Ese será el camino para bajar del Olimpo y para, quizás, tener una mejor y más larga vida.
P.S.: No puedo eviar remitirles a los blogs de dos ilustres visitantes, que dedicaron (hace mucho en el caso de Miss Sybarite, y algo menos The Blogolist) entradas a la paranoia que se ha generado con la jodida "gripe gochina" (como la llaman ellos)
Foto: El Dios de JL Martín que tan buenos momentos nos ha dado desde sus tiras de "¡Dios mío!" en la rvista "El Jueves"

4 comentarios:

Lamamma dijo...

Amén, hijo, amén. Yo siempre me he negado a la paranoia. He seguido consumiendo vaca, pollo, cerdo y lo que me ha apetecido a pesar de las graves amenazas y ahora seguiré saludando con dos besos, uno, o con un apretón de mano según proceda a pesar de medicos y ministra de sanidad (a tí particularmente te reservo un gran abrazo por si algun día conseguimos coincidir).

Por cierto, mis hijos empezarán el cole sin estar vacunados. ¿Seré mala, malísima madre?

añil dijo...

Pues así sea.

Encantada de volver a leerte.

laura dijo...

yo tampoco pienso,d momento, preocuparme en exceso,d entrada mi hija ha estado en contacto diario con niños cada día durante todas sus vacaciones, q parece como si en verano los tuviéramos encerrados en casa a cal y canto.D hecho no m vacuno ni para la gripe comun,hablan d q esta vacuna no ha pasado la fase experimental y q los vacunados serán como conejillos d indias, pero para la gripe comun tb puede suceder, el virus puede mutar cada año,de hecho es raro q no lo haga,y al ser diferente cepa la vacuna tampoco cada año es la misma,bueno al menos eso es lo q m explicó mi madre q trabajó 40 años en el departamento d sanidad,creo en principio , q se está exagerando el tema, pero bueno,ya se verá.Besitos majo!! cuanto tiempo sin saber d ti.

El Charolito dijo...

Lamamma: Gracias, guapa. Es un halago que compartas lo que digo. Y no, no eres mala madre. Lo de la vacuna es una gilipollez.
Añil: Gracias. Para mi sí que es un placer que hayas pasado por aquí.
Laura: Lo importante es, si se coge, te la tratas, y punto. Besos.